En cooperación con GRET, KORAL, RECARB, ODIGA, PADAS, ASPVEFS, ACDIB, MFNB, ANATRAF
Tras el devastador paso de Matthew por Haití, el proyecto de AVSF decidió ayudar a 8 organizaciones campesinas (2.280 familias) en los departamentos del Sur y Grand’Anse. La prioridad: promover actividades productivas que generen empleos e ingresos a largo plazo.
El balance del paso del huracán Matthew por Haití (octubre de 2016) es dramático: 1000 muertos, 175.000 damnificados, enormes daños en las infraestructuras, las viviendas y los recursos naturales. En las zonas más afectadas de Grand’Anse en el suroeste del país, la pérdida de rebaños podría rondar el 70% y la destrucción de cultivos el 80%, miles de familias campesinas lo han perdido todo.
Para AVSF, la situación exige una respuesta humanitaria rápida y coordinada, pero al mismo tiempo con perspectivas a largo plazo.
Las beneficiarias del proyecto son las familias más vulnerables, miembros de ocho organizaciones pre-identificadas para tener acceso al fondo de ayuda, un total de 2.280 familias. Esta ayuda de urgencia debe al mismo tiempo favorecer la reconstrucción de 200 casas, tratándose por lo general de techos que fueron arrancados, mejorar la situación nutricional de los más vulnerables y apoyar la reactivación de actividades agrícolas para permitir a las familias recuperar sus medios de subsistencia gracias a la agricultura y la ganadería.
Después del huracán, los agricultores deben realizar cultivos de ciclo corto, para alimentarse y volver a ser autónomos vendiendo su propia producción y de este modo evitar una migración forzada hacia las ciudades de los alrededores. Las especies preconizadas por el proyecto son los frijoles de lima con un ciclo de 1,5 mes, el frijol negro, maíz y semillas hortícolas (espinaca, ají, pimiento, zanahoria, calalú, etc.).
Para acelerar la reactivación, el proyecto tiene previsto rehabilitar 6 talleres de procesamiento de fruta remplazando el material y los equipos destruidos, y la creación de un fondo de recapitalización para permitir que los talleres retomen su actividad (compra de materias primas, embalajes, etc.). A nivel de la ganadería, se distribuirán 500 caprinos a las familias (cabras de razas locales y machos cabríos mejorados) además de una formación sobre atención básica. En paralelo, la distribución de semillas permitirá a las familias generar huertas caseras.
El huracán Matthew destruyó el sistema de irrigación y su reparación es una prioridad para relanzar los cultivos. Para hacerlo, se movilizarán 80 personas durante 10 días para la limpieza y drenaje del principal canal de irrigación, lo que tendrá como efecto colateral mejorar de forma duradera el acceso al agua para la irrigación agrícola.
El proyecto también debe permitir a los agricultores probar variedades mejoradas y prácticas agroecológicas y agroforestales adaptadas para superar la dependencia de insumos químicos y el endeudamiento permanente que generan los mismos.
El desarrollo de la agro-silvicultura para 850 familias, especialmente cacao y mangos, es uno de los ejes importantes del proyecto. Teniendo en cuenta las pérdidas de los productores a raíz del huracán Matthew, se preconiza una subvención. Estas medidas también favorecerán la participación de los jóvenes como actores del desarrollo local, a través de asociaciones o incubadoras de empresas.
Este proyecto recibió el apoyo de la Fondation de France y de la AFD.